Finalizando series

Finalizando series

En España lo de poner fin a las series nunca ha sido nuestro fuerte. Y esta máxima ha ido in crescendo desde la "Serranada" de Resines.

Me gusta la tele. Me gustan las series y veo todas las que puedo. Incluso las españolas, pues aunque muchos puristas no pueden consumir productos patrios, siempre digo que no podemos comparar con otros paises donde con el presupuesto de un capítulo podríamos hacer aquí media temporada.

Ayer terminó "Los Protegidos" con una resolución un poco caótica, dejando lagunas y sin resolver todas las tramas. Y no contentos con eso, nos dan un segundo final, a modo de universo alternativo, que al igual que el anterior deja los mismos sinsentidos.

¿Qué ha pasado con Rosa Ruano? ¿Detenida? ¿Si o no? Por que claro, si llevan varios capítulos jugando a descubrir que ella mató a su vecina, y en la última entrega dedican muchos minutos a esta subtrama, ¿lo resuelven con una simple confesión? Además, la interacción con el resto de personajes ha sido tan escasa, que Mario sólo aparecía en la secuencia, sin mediar palabra, como si del piloto automático de Aterriza como puedas se tratase...

El final de los hermanos Martín y Michelle, en el acto de "heroicidad" de Leo, quemándose a lo bonzo, es de juzgado de guardia. El hormonado muchacho, echa de la estancia a la persona que puede curarlo, Julia, para luego ni ser recordado por el gesto.

Que Humberto muera por una estrella de las que genera Angy (que ya les vale contar con ella y que no diga ni una sóla palabra) y a su hija Julia, una estrella  similar pase desapercibida... ¿Acaso llevaba chaleco anti-estrellas-ninja-con-poderes?

Si la mente de todos ha sido borrada por otro niño con poderes, ¿cómo es posible que con un simple abrazo se pase el efecto? Entiendo que la serie abusa de desafiar a todas las leyes de la física, química, etc. pero que se permitan la licencia de decir que el cariño que se tienen es lo que ha hecho que la recobren... Lo siento, pero cuesta demasiado.

Lucía siempre ha podido leer la mente, pero en la última temporada sólo de forma selectiva. Me explico, sólo lee la mente cuando y para lo que a la trama le interesa, porque si lee la mente a Madre, y sabe que quiere que obtenga información de Humberto, ¿no puede leer de su mente que tiene previsto deshacerse de ella? ¿que la ha engañado con la llamada de su papá?

Y ya para acabar el árbol, que se supone clave de todo, es destruido por Sandra al tratar de proteger a su familia. Entonces, o no consiguen su objetivo de poderse curar o es que la inmortal Julia puede plantar más arboles como ese en el jardín. No hubiera estado mal conocer el desenlace final.

A pesar de todo lo que digo, la serie, en su conjunto, ha sido más que aceptable. Un producto como este, tan familiar, a modo de cuento, no suele verse en primetime de ninguna cadena generalista. Además es un producto difícil, con muchos niños actuando y con la dificultad añadida de tener que utilizar demasiado los efectos especiales, algo que hace engordar el precio por capítulo, y aunque algunos no hayan estado nada cuidados (todos los de insectos, por ejemplo), es de aplaudir que una cadena y productora arriesguen un poquito más y se alejen poco a poco de la típica dramedia.

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