La pieza fundamental de este concierto en la misa de difuntos a seis voces que escribió Tomás Luis de Victoria en 1603 como parte del oficio de difuntos que dedicó a la emperatriz María de Austria, hermana de Felipe II. Se trata de una de las obras cumbre del maestro abulense, que en la última etapa de su vida sirvió como capellán en el convento de las Descalzas Reales, fundado precisamente por la emperatriz.
El coro de cámara Salix Cantor, de Madrid, ofrece tradicionalmente este oficio de difuntos en el mes de noviembre y elige para ello lugares emblemáticos de la geografía española. Si en 2024 el lugar elegido fue la Catedral de Granada, dentro de la conmemoración de su 500 aniversario, este año es la iglesia de San juan Bautista, en Ávila, por ser la parroquia y el lugar de bautismo de Tomás Luis de Victoria, compositor abulense y universal.
La entrada es libre y gratuita, con aportación voluntaria. Los fondos recaudados irán a parar integramente a la parroquia, para ayudar con la reparación de su calefacción.